Si quieres escribo sobre tí.
Lo estás deseando. Te encantaría.
Te imagino leyéndote, sonrisa silenciosa dibujada y ojos de finjesorpresa porque todo esto nos lo hemos gritado de ganas insaciadas muchas veces y años ya.
Escribirnos es preguntarse. Qué hago yo sola y que haces tu quedándote agarrado a un clavo ardiente que te calienta la cabeza y nada lo demás.
Yo he aprendido últimamente "mejor sola que mal acompasada".
Si lo necesitas nos escribo una parte.
No recuerdo el primer día, me suena la primera sensación. Un segundo de atracción, abres la boca y la cagas al estilo tipo duro rompebragas. Ellas un segundo de atracción y a partir de ahí ojos, babas y ilusiones.
Ventaja para mi, no te pienso entre mis sueños, estas a salvo conmigo.
Después,
tu whisky y mi ron de madrugada entre apuntes, libros y excusas.
Tus llamadas a mi balcón.
Tus tuppers.
Tus muchos tús y los perros paseándonos.
Mediodias comiendo juntos y cenas de comernos los ojos.
Tardes de pantano, montaña y oxígeno. Sofás, opio y demás.
Muchos amigos y un bebé.
Noches en vela y sangre, también.
Todo revuelto.
Ni tu ni yo.
Bien calladitos y miedicas.
Y tengo q decirte que calladito estás más tonto.
Era una historia con argumento oculto.
Dormí con él, dormiste con ella, estamos en paz.
Dormimos juntos, caricias y abrazos. Putos cobardes.